La Orquesta de Pulso y Púa Villa de Chiva vive uno de los momentos más duros y convulsos de su historia, porque Antonio González Jiménez, Toni para todos nosotros, nos dejó el pasado 11 de agosto de 2020, de una forma inesperada.
Es difícil describir el dolor de todos nosotros, ya que ha sido y será uno de los «padres» de esta orquesta, por la que ha luchado, amado, conservado, levantado y disfrutado. Nunca podremos olvidar a Toni, no sólo por su labor en la orquesta, que desde sus inicios ha formado parte de la junta directiva y que hasta el final seguía siéndolo, sino por la excelente persona que ha sido y su trato con las personas que hemos tenido el orgullo de convivir con él.
Intentar nombrar todas las cosas que ha hecho por esta Orquesta sería imposible, ya que ha estado ligado a ella desde los inicios hasta el final, ayudando a formar una orquesta desde la nada hasta construir la Orquesta tal y como hoy la conocemos.
Formó parte de la Junta Directiva de esta Orquesta en 1985, constando oficialmente como miembro de la misma desde 1987, y siendo Presidente desde 1991 hasta 1998, pasando a desempeñar durante toda su historia todos los diferentes cargos en la misma.
No sólo tiene a sus dos hijos, Fran y Jose en la Orquesta, que desde el principio han formado parte de ella, y sus nietas que también han empezado a formar parte de esta familia, si no que todos y cada uno de los músicos nos sentimos sus ahijados, porque así nos ha hecho sentir desde el principio.
Queremos recordar las palabras que Toni dedicó a la Orquesta con ocasión de la publicación de libro de las 3 Décadas de Historia de la OPP Villa de Chiva:
‘Desde que esta orquesta recogió, en el año 1986, el testigo de la
antigua Rondalla Chivana, hasta la fecha de hoy, año 2013, quiero
agradecer a todas las personas que en mayor o menor proporción
han ido sumando con su entrega, que hoy podamos decir que tenemos
una de las mejores orquestas de España.
Músicos que tenían entre 6 y 15 años, ya eran un modelo a seguir
por su buen hacer, que además de ser músicos ejemplares, han sabido
inculcar la misma política a los nuevos que se han incorporado a
la orquesta, lo cual los engrandece mucho más.
El camino, como en toda buena obra, ha tenido sus dificultades,
no todo ha sido perfecto pero siempre ha prevalecido el sentido común,
la inteligencia, bondad y sentimiento de la gran familia que
somos músicos, profesores, directores y juntas directivas que han
sacado el mejor rendimiento.
Mis deseos, que la orquesta tenga cuerda para siempre.’
A. González, Presidente.
No podemos nada más que agradecer eternamente a Toni, todo lo que ha hecho por esta familia, más bien que formara parte de ella, como uno de sus padres fundadores y velando hasta el final por la gente que la formamos, siempre con una actitud agradable, con una sonrisa y trabajando por ella.
Todos los que hemos tenido el placer de conocerle hemos tenido suerte por ello, y nunca podremos agradecerle todo lo que nos ha dado.
Por ello le estaremos por siempre agradecidos y tendrá el lugar que se merece en esta Orquesta y en nuestros corazones.
¡ NUNCA TE OLVIDAREMOS TONI !
TU ORQUESTA.
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